摘要:Si bien durante décadas el una vez llamado sindicalismo oficial aceptó sin chistar intromisiones gubernamentales de diverso tipo, cuando el PRI era el partido hegemónico, algo ha cambiado en él, pues no acepta ya la intromisión del gobierno, mucho menos si éste es un gobierno de derecha. Digamos que amplias franjas del sindicalismo actual razonan de la siguiente manera: los asuntos de los sindicatos los arreglan sus propios agremiados, bien o mal, pero sólo a ellos les corresponde hacerlo.