摘要:El concepto de Disociación originalmente incluía componentes psicológicos y somáticos. Sin embargo, versiones recientes del Manual de Diagnóstico y Estadísticas de los Trastornos Mentales (DSM-IV) han deslindado ambos elementos. En el DSM las manifestaciones psicológicas de la disociación se identifican como manifestaciones de un Trastorno Disociativo; mientras que el aspecto somático se identifica como parte de los Trastornos Somatoformes. Sin embargo, en estudios clínicos recientes se ha resaltado el hecho de que hay una comorbilidad extrema entre ambos trastornos y que se puede corroborar el hecho de que hay una interdependencia entre las manifestaciones psicológicas y somáticas de la disociación. En el siguiente estudio de caso, la constelación clínica de la paciente ilustra de una manera lúcida cómo sus defensas disociativas comenzaron con la manifestación de un Trastorno Conversivo y, tras un mal manejo clínico, sus síntomas disociativos de inmediato se transformaron en un Trastorno de Amnesia Disociativa. Casos como estos muestran convincentemente cómo las defensas disociativas no sólo incluyen el aspecto psicológico, sino que también se extienden al dominio corporal.
其他摘要:The concept of Dissociation was originally conceived as having a psychological and a somatic component. Nevertheless, recent versions of the Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders (DSM-IV) have isolated both elements. In the DSM the psychological manifestation of dissociation is diagnosed as a Dissociative Disorder and the somatic domain is diagnosed as a Somatoform Disorder. However, recent empirical and clinical evidence have been highlighting and corroborating a high degree of comorbidity between such disorders and a constant interplay between somatic and psychological dissociation. In the following case study, the clinical constellation of the patient nicely illustrates that her dissociative defenses began as a Conversion Disorder and how, after a mishandling of the case by a clinician, her dissociation symptoms were instantly transformed in a typical Dissociative Amnesia Disorder. Cases like this convincingly illustrate how the dissociative defenses not only subsume the mental but also extend to the bodily domain.