摘要:La minería en la península ibérica durante la antigüedad, y muy especialmente bajo dominio romano, alcanzo una escala considerable en diversas regiones como el sudeste (Carthago nova), el sudoeste (con minas como las de río Tinto o Aljustrel) y el noroeste peninsular con sus numerosas minas de oro. Sus restos son en ocasiones importantes y fácilmente reconocibles cuando han quedado "fosilizados" ; en otros casos prácticamente han desaparecido, bien debido a la continuidad de las labores, bien a causa de otras alteraciones como la urbanización o los cultivos.-- Al emplear la expresión "paisajes mineros" lo hacemos en el sentido de que en ellos la minería ha sido una actividad fundamental (no exclusiva) y ha dejado huellas evidentes ; pero no podemos olvidar que, en cualquier caso, no estamos ante una economía totalmente especializada y, por lo tanto, si no tenemos en cuenta el desarrollo de otras actividades (y muy especialmente de la agricultura) la minería, los mineros y los paisajes que generaron no pueden ni comprenderse ni explicarse.