期刊名称:RETOS. Nuevas Tendencias en Educación Física, Deporte y Recreación
印刷版ISSN:1579-1726
电子版ISSN:1988-2041
出版年度:2016
期号:29
页码:32-37
语种:Spanish
出版社:Federación Española de Docentes de Educación Física
摘要:El nivel de condición física es un marcador de salud para las personas mayores. El objetivo de este estudio fue evaluar y comparar laefectividad de un programa de ejercicio físico, administrado de forma presencial y dirigido versus la prescripción a través de una aplicación móvil.Veintitrés participantes de 55 a 73 años fueron incluidos en la intervención de 10 semanas de duración. Los participantes fueron distribuidos en un grupopresencial (n=16) y en un grupo móvil (n=7). El grupo presencial recibió 20 sesiones (70-80 minutos de duración) a razón de dos semanales de actividadfísica centrada en ejercicio aeróbico y resistencia muscular, el grupo móvil recibió el mismo programa pero los contenidos fueron prescritos a través deuna aplicación móvil. Presión arterial media, sistólica, diastólica, frecuencia cardiaca en reposo, porcentaje de masa muscular y de grasa corporal,perímetro de cintura, equilibrio, fuerza y capacidad aeróbica fueron evaluados antes y después de la intervención. El grupo presencial obtuvo mejoras enla presión arterial media, sistólica y diastólica, en la frecuencia cardiaca después del test y en la capacidad aeróbica (p< .001, p< .001, p=.001, p=.003,p=.004, respectivamente). No se observaron diferencias significativas en ninguna de las variables en el grupo móvil. Los resultados sugieren que elejercicio dirigido es más efectivo en las variables analizadas que el prescrito mediante la aplicación móvil. Futuros estudios que impliquen muestras demayor tamaño deben confirmar o refutar estos resultados.
其他摘要:Physical fitness level is a health marker in elderly people. The aim of our study was to evaluate and compare the effectiveness of a physicalexercise intervention, delivered face-to-face versus prescription through a mobile application. Twenty three participants (55-73 years old) wereincluded in the 10-week intervention. Participants were allocated to the training group (n=16) or mobile group (n=7). The training group received 20sessions (70-80 minutes per day) of physical exercise and were assigned to aerobic and resistance training (two sessions/per week). Intervention contentwas the same in the mobile group; only the delivery mode differed by means of a mobile application. We measured mean arterial pressure, systolic bloodpressure, diastolic blood pressure, heart rate, percentage of muscle mass and body fat, balance, waist circumference, strength and aerobic capacity beforeand after 10 weeks of exercise intervention. The training group obtained improvements in mean arterial pressure, systolic blood pressure, diastolic bloodpressure, heart rate after exercise and aerobic capacity (p< .001, p< .001, p=.001, p=.003, p=.004, respectively). There were no significant changesin the mobile group. The results suggest that face-to-face exercise is more effective than prescribed using mobile applications. Future studies involvinglarger sample sizes should confirm or refute these findings.