摘要:Este artículo analiza la lectura e interpretación que realizó el consulado británico en Barcelona del ciclo huelguístico en Cataluña entre septiembre de 1931 y diciembre de 1933. Norman King, que dirigió un consulado estratégico para Londres, afrontó uno de los principales temas candentes de la trayectoria catalana durante la Segunda República. La reconstrucción factual fue bastante precisa. No obstante, la interpretación quedó condicionada por dos vectores principales. Primero, los intereses de la política exterior británica y su lógica anticomunista. Y, segundo, un ciclo de largo recorrido, tejido por el propio consulado en Barcelona, que interpretó la insurrección obrera en Cataluña como revolucionaria desde 1909. King no sólo presentó un estado de opinión de la primera potencia europea e imperial sobre el conflicto social en Cataluña, sino también una recopilación de argumentos y constataciones que intentaron rectificar la mirada relativamente amable que el Foreign Office proyectó sobre la Segunda República.